La situación económica en el país no es la mejor, y esto no es ninguna novedad para nadie, debido a que se está inmerso en esta problemática hace mucho tiempo. Como consecuencia del mal presente, la inversión directa de España en el exterior creció un 91,69 por ciento durante el segundo trimestre del año, si se lo compara con el mismo período pero del 2009. La parálisis y la indefinición financiera son los factores fundamentales para que se registre este elevado número. Los inversores están muy desanimados a hacer negocios dentro del territorio nacional, debido a que no cuentan con una buena seguridad.
El informe fue realizado por Invest in Spain, que es la sociedad pública que depende del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio. De esta forma, la inversión total de España en otras regiones ascendió hasta llegar a los 5.731,6 millones de euros, mientras que hace un año sólo habían 2,989,9 millones de la misma moneda. El principal receptor de los inversores nacionales fue Estados Unidos que recibió 1.166 millones de toda la cifra que se explicó anteriormente. Las regiones que le siguen son Irlanda y Reino Unido ya que tienen una inversión española de 920 y 581 millones de euros respectivamente.
Otro dato que no debe ser pasado por alto es que el 48,9 por ciento de la inversión que se generó, tuvo como destino a otros lugares de la Unión Europea. Si se traslada ese porcentaje a los números alcanza los 2.803 millones.
Otra de las cuestiones que también registró un aumento en este periodo fue la inversión extranjera en España. El incremento se dio en menor medida, ya que fue del 36,1%. Los países Bajos es el que encabeza la lista de los principales inversores en España, con un total de 1.775 millones de euros depositados.