Nueva Rumasa, cuatro sociedades en suspensión de pagos

Con la solicitud, esta mañana, de concurso voluntario de acreedores para Clesa y Cacaolat, ya son cuatro las empresas de la familia Ruíz-Mateos que presentan suspensión de pagos, además de Dhul y Carcesa.  Además, el concurso para las bodegas gaditanas Garvey, Valdivia, Zoilo Ruiz-Mateos y Teresa Rivero se presentará de forma inminente, posiblemente a principios de la próxima semana. José María Ruiz-Mateos había anunciado a principios de este mes que algunas de sus empresas solicitarían este concurso voluntario de acreedores, aunque no precisó cuáles. Sólo dejó al margen de este procedimiento a la división hotelera Hotasa, cuyos hoteles puso a la venta.

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El empresario anunció también que prepara una querella contra el Banco Santander, al que responsabilza de su situación «extrema» al «cortar de la noche a la mañana» la financiación a las empresas del grupo, y otra contra Emilio Botín a título personal. En este sentido, Ruiz-Mateos anunció que crearán una plataforma de afectados por el Santander. «Pensamos investigar todas y cada una de las causas que tienen abiertas, tipo Madoff o Banif», dijo el empresario en referencia a la campaña que prepara contra el presidente del banco, Emilio Botín.

Por otra parte, el hijo del empresario, Javier Ruiz-Mateos, asegura que ninguna de las empresas emisoras de pagarés entrará en concurso, y que están en negociaciones avanzadas para vender algunas compañías del grupo a fondos de capital riesgo. «Tenemos ofertas en firme que esperamos cerrar muy pronto».  Además, el ejecutivo anunció que Nueva Rumasa, como sociedad individual, ha sido declarada en situación de preconcurso, con lo que serían 30 las compañías que se encuentran en suspensión.

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